Esta clínica veterinaria ubicada en Ponteareas (Pontevedra) quería mejorar la distribución del local, contar con un ambiente profesional y cercano e imprimir su propio estilo en el espacio.
Por eso el principal objetivo de este proyecto de reforma se basó en crear una optimización de las diferentes zonas del negocio, tanto para el público como para los propios trabajadores de la clínica veterinaria, teniendo en cuenta las circulaciones y buscando siempre una ambiente de confort de alta calidad.
Para lograr nuestro desafío, se amplió el área dedicada al público creando dos espacios diferenciados, tal y como marcan las disposiciones de Pet Friendly, y se reubicó la recepción.
Las diferentes divisiones de trabajo están intercomunicadas para agilizar y mejorar las labores de los veterinarios y el equipo de trabajo (consultas, laboratorio, sala de rayos, y boxes) lo que repercute en una optimización de recursos humanos. Por su parte, la zona quirúrgica se ubica al fondo del local para aportar una mayor privacidad y que no se vea interrumpido con otras actividades propias de la clínica.
Los materiales y los acabados son de alta resistencia y calidad, adecuados para los usos veterinarios y la identidad corporativa está presente en todo momento logrando así la fusión perfecta entre el diseño de interiores y la funcionalidad de la clínica. Por otro lado se añadieron diferentes detalles decorativos como diversas imágenes de animales de compañía que acompañan a mascotas y dueños durante su estancia en el local.
Si hay algo imprescindible en toda clínica veterinaria es lograr transmitir confianza y profesionalidad. Se trata de un espacio clínico y por ello todo tiene que estar milimétricamente calculado para que los pacientes estén lo más tranquilos posibles. Con esta reforma, la clínica veterinaria Canis lo ha logrado.
